La palabra paciente proviene del latín patior, pateris, passus sum, que significa “padecer”. Que es donde se toma el término sanitario de paciente. Este además de ser lo que dicen que es lo usuario de la palabra, es lo que dice la propia palabra.
El paciente es una persona humana, es decir, un individuo racional; como un individuo es distinto a los demás, como racional piensa, es libre capaz de tomar decisiones. La palabra paciente respecto a la de un enfermo es una palabra más intensa. El que tiene una enfermedad no siempre la padece, y/o no siempre sufre.
Dando otra definición de paciente diríamos que el paciente es la persona más importante en la atención de enfermería, ya sea en el hogar, en la sociedad o en cualquier institución de salud. Nosotras, las enfermeras, como integrantes del equipo de salud, a él le debemos orientar nuestra atención, nuestra observación y nuestra investigación en el trabajo diario para poder atenderlo y servirle mejor.
Si en algo ha cambiado profundamente la situación del enfermo respecto a la de hace medio siglo, es en que se ha reducido de manera espectacular su sufrimiento, ya que se le esta ganando batalla al dolor.
Si antaño se considero condición normal del enfermo su sufrimiento, hoy se considera esta una situación irregular y transitoria. Incluso en los enfermos terminales se considera que la eliminación del sufrimiento es la terapia más importante aunque como efecto secundario de esta se acelere el proceso Terminal.
Es sintomático que sea millones los “pacientes” que por dejar de serlo paguen además de los impuestos o deducciones en nómina (que tanto da), una mutualidad que les libere de los padecimientos en la medicina menor.
Es curioso que el termino enfermo no implica necesariamente relación con el medico, mientras que el paciente si, de manera que este se acompaña normalmente posesivo (voy a visitar a mis pacientes; doctora, hemos llevado su paciento al quirófano), mientras que es menos frecuente el uso del posesivo con la palabra enfermo.
Mas aún, en la medida en que la medicina se va inclinando a la prevención, el termino paciente va dejando de tener sentido. Es decir que no son pacientes clínicamente, y no que lo son en tanto en cuanto esta asignada a un medico la responsabilidad de la salud.
Para tal situación se ha forjado la expresión de “usuario de la sanidad”, lo que aleja de manera notable al “usuario” del médico porque este se lo ofrece el sistema como un elemento más del conjunto de servicio para la salud. Será o no será esta la intención, pero ese es el resultado. El médico ha acabado perteneciendo a un sistema administrativo, y el usuario es la otra cara del sistema.
paciente ambulatorio
Paciente que visita un establecimiento de atención de la salud por razones de diagnóstico o tratamiento sin pasar la noche en el mismo. A veces, se llama paciente de día o paciente diurno.
Pacientes esperando su turno en un ambulatorio.
paciente hospitalario:
es el paciente que padece alguna enfermeda va al hospital lo internan por alguno dias lo medican y cuando ven que ya esta mejor le dan de alta.
Pacientes domiciliario.
Este está en su casa y el médico o enfermera le brinda servicios en su propia casa.
Paciente comunitario
:es el pacienteque va al hospital, clinica, policlinica o dispensario a que lo dianostiquen y lo medique pero no lo interna sino que se va a su casa a mejorase con el medicamento
LA ENFERMERA ANTE EL PACIENTE MORIBUNDO
La enfermera es la profesional del equipo de salud, que más contacto tiene con el enfermo. Dedica su tiempo, su preocupación, su responsabilidad y sus conocimientos para cuidar a sus pacientes.
La enfermera es la persona que llega a conocer y detectar con mayor acierto, las necesidades e inquietudes del enfermo. Su relación es íntima, de contacto físico y emocional.
La relación enfermera - paciente es el "eslabón humano" que enlaza la cadena interminable del complejo manejo del paciente terminal. Su actitud de constante preocupación por proporcionar bienestar al paciente; la coloca en calidad de "salvadora" de una muerte indigna. Es su compromiso humano el aspecto sobresaliente que imprime el respeto a su vida profesional. No son sus conocimientos sobre los avances científicos o su destreza para manejar las técnicas sofisticadas, que día a día aparecen en el mercado de la investigación médica. Es más bien, ese comportamiento sutil de comprensión, al alcance de la intuición de cualquier ser humano, lo que la hace indispensable.
Es una combinación de conocimientos científicos con un interés personal acerca del acto de agonizar y morir. Una mezcla de "agua y aceite", entre la aplicación fría de un tratamiento científico y el complejo e intenso manejo de los aspectos humanos.
Así lo expresa el escritor Jorge Orgaz: "Humanismo significa en el fondo estar imbuido de un sentimiento inteligente de los intereses humanos. El humanismo importa porque forma al hombre y el médico (enfermera) deben ser humanos sobre todo".
Para analizar la relación enfermera - paciente, tendré en cuenta los siguientes aspectos que influyen en el comportamiento de la enfermera:
Conocimientos sobre el manejo de los pacientes terminales
Las universidades que otorgan diplomas para acreditar la carrera profesional de enfermería, no incluyen en su currículo académico los conocimientos sobre manejo del paciente terminal. No consideran primordial el estudio de la tanatología ni la enseñanza profunda de los cuidados paliativos.
Los estudiantes de enfermería, sobresalen en sus conocimientos acerca del paciente recuperable y rehabilitable. La filosofía académica está basada en prepararlos esencialmente en el manejo de una medicina curable y triunfalista. Es decir, el paciente terminal es un tema de rechazo, impregnado de ignorancia, que carece de sustentación académica. Los universitarios no han aprendido ni debatido durante la carrera, sobre el complejo tema del manejo de la agonía y finalmente de la muerte. No tienen un criterio formado para actuar proporcionalmente de acuerdo con sus conocimientos científicos y psicológicos, con la seguridad y el profesionalismo indispensable para el cuidado del paciente en estado terminal.
Disponibilidad de tiempo
La enfermera encamina sus actividades a los compromisos administrativos y burocráticos que cubran las necesidades económicas institucionales; tiene que cumplir con un sinnúmero de funciones administrativas que la disipan de su acercamiento humano con el enfermo.
Su disponibilidad de tiempo es mínima y generalmente escuchan al paciente con poca intención de comunicarse profundamente con él. Sus metas son cumplir con una serie de procedimientos profesionales para luego llenar los formularios que acreditan el cuidado legalmente reconocido por la institución hospitalaria. La práctica de enfermería está centrada en el manejo adecuado de las instrucciones y formulaciones médico - científicas. La enfermera sobresaliente en el cumplimiento profesional de sus funciones, es aquella que practica los procedimientos de enfermería al "pie de la letra", coincidiendo con las técnicas y órdenes médico - hospitalarias.
El tiempo dedicado a la comprensión y comunicación con el paciente, no se valora ni se estimula y tiende a malgastarse porque carece de planeación. Los momentos libres son valiosos para el personal de enfermería, cuando éste pretende disiparse del conflicto humano permanente que genera el sufrimiento de los pacientes y familiares en los ámbitos de la muerte.
La negación de la muerte, primera defensa psicológica frente al dolor, es el común denominador de esta actitud de la enfermera, como de cualquier otra persona. Sin embargo, si al personal de enfermería se le valorara por su aporte humano de comprensión con el enfermo, tanto sería su crecimiento interior personal, como efectivo para lograr un buen manejo del sufrimiento en el paciente terminal. Cícely Sanders al respecto dice: "El tiempo no es una cuestión de longitud, es una cuestión de profundidad".
Circunstancias inadecuadas para el cuidado de los pacientes terminales
1. A los enfermos terminales no se los cuida en los lugares adecuados. Generalmente son hospitalizados en los pabellones o unidades de medicina interna, donde se entremezclan absurdamente con enfermos curables o en estados crónicos, cuyo manejo difiere sustancialmente.
Otros son ubicados en cuidado intensivo, donde la enfermera dedica su tiempo al cuidado del "aparataje" y la tecno-logía avanzada que invaden al paciente. Su contacto físico se limita a mover el cuerpo del enfermo ya sea para evitar-le las escaras, bañarlo o manipular algún tubo o sonda que tenga introducido.
COMUNICACIÓN.
El trabajo puede hacerse cada vez más sencillo conforme el personal sanitario aprende a comunicarse mejor con los enfermos y sus familias, miembros del personal y personas extrañas con las que diariamente se comparten circunstancias y esfuerzos. En la medida que el personal sanitario adquiera experiencia en establecer una armonía y clima favorable al bienestar del paciente, habrá avanzado bastante para disminuir la ansiedad y aumentar la confianza entre los pacientes y las enfermeras.
La comunicación es vital para todas las personas. La manera en que alguien se relaciona puede aumentar la satisfacción obtenida o causar sensaciones de angustia. La habilidad para comunicarse es un proceso que dura toda la vida y que se perfecciona mientras no desfallezcan el esfuerzo.
La comunicación es un componente básico dentro de la enfermería. El profesional sanitario debe saber escuchar y entender al paciente. La comunicación juega un papel fundamental en la calidad de vida y la satisfacción de las personas en general, y en los enfermos y sus familias en particular.
La comunicación no solo consiste en el diálogo entre dos o más personas, sino también los gestos, posturas, las miradas.
La comunicación es la que establece la diferencia entre la asistencia sanitaria eficaz y no eficaz.
Es importante darse cuenta que cada persona con la que nos comunicamos posee un conjunto de percepciones a través de las cuales mira al mundo. Cada uno de los seres humanos debe llegar a conocer y apreciar las percepciones de los demás.
No es tarea fácil, pero el personal sanitario puede obtener información continua acerca de cómo otras se perciben a sí mismos, a su trabajo, a su vida, y a su salud, mediante la búsqueda de caminos para conocerlos mejor.
La retroalimentación que un individuo recibe en la comunicación a menudo lo alienta a continuar y buscar otras relaciones. A veces la retroalimentación es negativa; entonces la comunicación cesa por un tiempo o es permanente.
Con frecuencia, no se recibe retroalimentación en los intentos de comunicación y el indicador queda en un dilema. En estos casos, deben realizarse otros intentos para comunicarse o buscar alguna solución con un receptor diferente.
Los usuarios de los servicios sanitarios esperan una comunicación útil, comprensible, y eficaz por parte del personal que trabaja en estos servicios
Por todo eso hay que tener en cuenta que la enfermería juega parte importante en el proceso de comunicación. En la vida diaria y en la práctica de la enfermería, las comunicaciones pueden ser eficaces, de intercambios productivos o ser causas de confusión y desaliento. El arte de la comunicación es un componente esencial en la vida del personal sanitario.
La enfermería es un proceso de interacción social mediante el cual el personal de enfermería induce una mejora en el estado de salud de los pacientes como resultado del diálogo terapéutico. La destreza para la comunicación es parte integral de todo el proceso de enfermería.
Funciones de la comunicación en la enfermería
Información: La recogida de la información del diagnóstico y la toma de decisiones. Se debe dar información al paciente de la medicación, los procedimientos que se le va a realzar, etc.
Influencia: Es la utilización de las técnicas de comunicación al ayudar a los pacientes a modificar sus actitudes.
Aporte de comodidad: Consiste en la interacción con los pacientes para proporcionar seguridad, apoyo, y comodidad, reduciendo la incertidumbre de los pacientes en momentos estresantes para aliviar y mitigar su sufrimiento emocional.
De relación: Interacción para definir, controlar y modificar la relación entre el profesional de enfermería y el paciente. Establecimiento de una relación de colaboración entre el proveedor y el paciente.
Identidad: Configuración de identidades propias para presentarse a uno mismo de manera que introduzcan credibilidad y que generen amistad, respeto y sensación de amparo.
Comunicación durante el proceso de la enfermería
Valoración:
- Entrevista y elaboración de la historia
- Realización de exploración física (utilización de los canales visuales, auditivos y táctiles).
- Observación del comportamiento no verbal
- Revisión de historia clínica, literatura científica y pruebas diagnósticas.
Diagnóstico de enfermería:
- Análisis de los hallazgos de la valoración
- Análisis de las necesidades de asistencia sanitaria y establecimiento de prioridades con el paciente y sus familiares.
Planificación:
- Redacción de planes de cuidados
- Solicitud de actuaciones de otros profesionales sanitarios
- Inicio de las sesiones de planificación del equipo sanitario
- Análisis de los sistemas de ejecución con el paciente y sus familiares
Ejecución:
- Comentarios sobre la asistencia con otros profesionales sanitarios
- Educación del paciente con respecto a los tratamientos
- Provisión de apoyo terapéutico
- Utilización de otras fuentes de recursos sanitarios.
- Registro del curso del paciente dentro del plan de cuidados
- y de las notas de enfermería.
Evaluación:
- Obtención de retroalimentación verbal y no verbal
- Redacción de las conclusiones con respecto a los resultados esperados
- Actuación del plan escrito de asistencia
- Explicación de las revisiones del plan a los pacientes
COMUNICACIÓN DE LA ENFERMERA/PACIENTE.
La relación de la enfermera con el paciente es de gran importancia en todas las fases de la enfermería. La relación que se establece condicione todo lo que hace la enfermera con o para el paciente y puede afectar profundamente a la calidad y la eficacia de su cuidado.
La aceptación mutua es básica para lograr una relación satisfactoria, entre la enfermera y el paciente. La enfermera debe aceptar al paciente sin discriminaciones o perjuicios.
También es importante que la enfermera este consciente de las respuestas de
conducta característicamente asociadas con personas de diferentes medios culturales y de diferentes edades
Cuando la enfermera infunde en el paciente el sentimiento de que se preocupa por el y por lo que experimenta, este la acepta adquiere confianza con ella.
La relación que se establece entre las enfermeras y el paciente es ayuda o asistencia. Es la base de la práctica de la enfermería y esta implícita en toda la interacción que ocurre entre la enfermedad y el producto.
En el campo de salud la relación-ayuda, suele denominarse terapéutica, porque es un elemento clave que permite al profesional de puesto, la relación de ayuda no es exclusiva de la enfermería ni del campo de salud.
Un elemento esencial es la empatía, es decir, la capacidad de reconocer y comprender los sentimientos de otras personas en una situación determinada. La empatía significa tratar de imaginar que uno se encuentra en la situación de otra persona y considerar las cosas desde un punto de vista.
Otra característica de la relación de ayuda que suele mencionarse es el respeto mutuo. Respetamos al paciente como una persona valía y digna, y observamos las cortesías sociales que lo indican.
Llamamos a las personas por su nombre y e l titulo que presenten. A muchos pacientes mayores no les gusta que se les llame solo por su nombre y menos que se les tutee, así que prefieren que se le anteponga por su nombre y apellido.
Para que la relación sea eficaz la enfermera también debe respetar al paciente, su preparación de enfermería la califica para ayudar a otro en lo que respecta a los problemas de salud, y estas cualidades engrandecen el respeto de los que han tenido esa preparación profesional.
Tanto la empatía como el respeto mutuo contribuyen a fomentar un clima de confianza, que es un elemento básico en la relación de ayuda. La autenticidad es otra característica de la relación de ayuda útil para crear una atmósfera de confianza. La espontaneidad de las respuestas y una actitud de la enfermera que no implique defensa o superioridad.
Tanto la enfermera como el paciente les preocupan principalmente las razones que tiene el enfermo para buscar ayuda. El objetivo de las enfermeras es ayudar a satisfacer sus necesidades de salud.
Los investigadores que han estudiado la relación enfermera-paciente identifican tres fases principales en la relación. En primer termino, de introducción u orientación, cuando la enfermera y el paciente se conocen y confían entre sí, después de trabajo, y por último de terminación. Algunos autores subdividen estas fases y otro identifican más de tres, pero ya que sus componentes coinciden, se analizarán las tres principales:
Fase de introducción u orientación:
Es la fase en que la enfermera y el paciente comienzan a conocerse y a confiar entre sí. En circunstancias normales, la inician siendo extraños. Sin embargo, la enfermera suele tener la ventaja de contar con algunas informaciones del paciente antes de conocerlo,
La enfermera siempre toma la iniciativa en la relación que se establece, es quien debe fijar el tono de la entrevista y toma la dirección para establecer las normas de la relación de trabajo.
Durante esta fase de introducción, ambos se identifican por sus nombres y se aclaran los papeles. Ambos llegan con ideas preconcebidas sobre la naturaleza de la relación. Es posible que el paciente haya sido condicionado de algunas ideas de los hospitales y las enfermeras. Es posible que tuviese una experiencia anterior con los sistemas de atención de salud, la cual influya en sus ideas sobre los que recibirá. La enfermera tendrá la experiencia previa en el área clínica y la enseñanza que ha recibido en sus clases, como base para sus expectativas.
Una orientación en la unidad de enfermería o en la institución de salud, si es de atención ambulatoria, suele formar parte de la fase de introducción. Es importante presentar al paciente con las personas que participan en su atención y explicarles sus funciones.
Fase de trabajo:
La fase de trabajo de la relación de enfermera-paciente se inicia cuando la primera ha reunido todos sus datos y esta ha comenzado a elaborar un plan tentativo de atención para el paciente. Una mayor insistencia en la responsabilidad de quienes proporcionan y obtienen los servicios de salud ha originado la premisa de que ambos son personas iguales en el proceso de atención.
Zangari y duffy identifican 7 etapas en el proceso, que proporcionan pautas de adecuadas a las enfermeras que desean iniciarlo:
1- La enfermera reúne los datos de su información básica.
2- La enfermera y el paciente comentan lo que esperan ambos.
3- Juntos establecen metas mutuamente satisfactoriamente a corto y largo plazo.
4- Se establece un convenio que indique como se dividirán las responsabilidades para lograr cada meta.
5- La enfermera coordina el cuerdo con otros miembros del personal de salud, y con los familiares del paciente.
6- La enfermera y el paciente valoran el avance hacia las metas fijadas.
7- Si es necesario modificar los objetivos, se elabora un nuevo convenio. Si se
han satisfecho las metas o el paciente es dado de alta, termina el contrato.
Durante la fase de trabajo de la relación enfermera-paciente, la enfermera cumple una función importante de motivación, además de sus responsabilidades de llevar a cabo las medidas específicas de la atención de enfermería.
Estimula al paciente a asumir una responsabilidad creciente en su cuidado personal, a medida que pueda hacerlo, y le ayuda a que continué esforzándose por alcanzar las metas que juntos establecieron. Los familiares y amigos, que suelen estar tan preocupados por su salud como el propio paciente, también pueden proporcionar apoyo para motivarlos a que trate de alcanzar las metas establecidas.
Fase de terminación:
La relación enfermera-paciente termina cuando el paciente es dado de alta, la enfermera lo deja por otros deberes o vacaciones, o deja de encargarse de el por cualquier otra razón. En ocasiones la relación dura poco; por ejemplo, cuando la enfermera ha tenido la responsabilidad de cuidarlo por un turno solamente.
La enfermera de salud comunitaria puede tener pacientes con los que trabaje durante años. Independientemente de lo que dure la relación, hay una sensación inevitable de pérdida cuando termina. Por supuesto, es mas aguda cuanto más prolongada haya sido aquella.
Durante la fase de terminación es útil revisar con el paciente los logros obtenidos o el avance hacia las metas preestablecidas. Los pacientes también tienen un sentimiento de logros si se han alcanzado las metas o ha habido un avance claro hacia ellas por la ayuda de la enfermera.
Cuando el paciente se traslada a otra institución necesita estar preparado para el cambio.
Relación médico-Enfermera
En muchas ocasiones ocurre que algunos médicos se sienten superiores a las Enfermeras y también puede pasar al reves, enfermeras que tratan de realizar la medicina sin que su títula sea válido para esta cuestioón.
Pero menos mal que esto ocurre poco, desde mi punto de vista cada uno de ellos, médicos y enfermeras, tienen su misión dentro del ámbito sanitario, y esta misión debe ser realizada por ambos a modo de equipo por lo que debe existir una simbiosis entre ambos, cada uno con su función con sus deberes y sus derechos, no se puede permitir la existencia de abusos de autoridad por parte del médico, ya que para el la enfermera es fundamental para desarrollar adecuadamente su labor de curar, ni tampoco puede existir intromisión de la enfermera en el trabajo del médico, ya que la responsabilidad recae sobre el médico y el título lo tiene este.
Así que cada uno debe realizar su funcion de acuerdo con sus conocimientos y entre ambos con una buena coordinación conseguirán la cura que desean para los pacientes
NECESIDADES BÁSICAS DEL PACIENTE.
Gran parte de la asistencia de enfermería consiste en satisfacer necesidades básicas, esenciales, comunes, a todas las personas, enfermas o sanas.
No hay ninguna duda de que existen ciertas necesidades básicas comunes de la humanidad y que es necesario satisfacerlas para que el individuo logre su nivel óptimo de bienestar.
Este tema ha sido estudiado profundamente en las ciencias sociales, que buscan la fuerza primaria de motivación fundamental para la conducta humana, y por los investigadores en el campo de la salud, que causan problemas de salud. En algunas épocas, se pondrían dividir en dos grandes grupos: Fisiológica y Psicológicas.
Algunos las clasificaron según su origen: interno o externo, otros más han identificado grandes lista de necesidades del ser humano tomando en consideración que todas son básicas.
Hay una línea de categorías básicas de necesidades del ser humano que pueden ordenarse por su prioridad y en cuanto a su satisfacción, las categorías son:
1- Necesidades biológicas.
2- Necesidades de protección y seguridad.
3- Necesidades de amor y pertenencia.
4- Necesidad de estimación.
5- Necesidad de realización personal.
6- Necesidad de respirar oxigeno.
7- Necesidad de evacuar los desechos corporales.
8- Necesidad de moverse y mantener una postura adecuada.
9- Necesidad de dormir y descansar.
10- Necesidad de elegir la ropa (de vestirse y desvestirse).
11- Necesidad de mantener una higiene corporal adecuada.
12- Necesidad de comunicarse con los demás.
13- Necesidad de mantener la temperatura corporal dentro de los límites definidos.
NECESIDADES PSICO-SOCIALES.
1- Necesidad de sentirse seguro y protegido de amenazas.
2- Necesidad de aceptación.
3- Necesidad de ser deseado o de pertenencia.
4- Necesidad de socialización.
5- Necesidad de independencia y a veces de dependencia e interdependencia.
6- Necesidad de libertad para tomar decisiones.
7- Necesidad de desarrollar y usar sus potencialidades.
8- Necesidad de profesar su fe.
9- Necesidad de actuar de manera que se sienta satisfecho consigo mismo.
10- Necesidad de aprender, descubrir o satisfacer la curiosidad que conduzcan al desarrollo normal, a la salud y acudir a los centros de salud disponibles.
DERECHOS Y DEBERES DEL PACIENTE.
Usted como ciudadano tiene derecho a una atención sanitaria en libertad, con respeto y dignidad humana (art. 43 de la Constitución). Al mismo tiempo como usuario de cualquier hospital tiene una serie de deberes cuyo cumplimiento garantiza su propia atención y el hospital, sea más útil y más eficaz a la sociedad a la que sirve.
Por su gran importancia se ha reproducido la carta de derechos y deberos del usuario:
Derechos:
1. El usuario tiene derecho a recibir una atención sanitaria integral de sus problemas de salud, dentro de un funcionamiento eficiente de los recursos sanitarios disponibles.
2. El usuario tiene derecho al respeto a su personalidad, dignidad humana e intimidad, sin que pueda ser discriminado por razones de tipo social, económico, moral e ideológico.
3. El usuario tiene derecho a la confidencialidad de toda información con su proceso, incluso el secreto de su estancia en centros y establecimientos sanitarios, salvo por exigencias legales que lo hagan imprescindible.
4. El usuario tiene derecho a recibir información completa y continuada, verbal y escrita, de todo lo relativo a su proceso, incluyendo diagnósticos, alternativas de tratamiento y sus riesgos y pronóstico, que será facilitada en un lenguaje comprensible. En caso de que el paciente no quiera o no pueda manifiestamente recibir dicha información, ésta deberá proporcionarse a los familiares o personas legalmente responsables.
5. El usuario tiene derecho a la libre determinación entre las opciones que le presente el responsable médico de su caso, siendo preciso su consentimiento expreso previo a cualquier actuación, excepto en los siguientes casos: Cuando la urgencia no permita demoras. Cuando el no seguir tratamiento suponga un riesgo para la salud pública.
Cuando no esté capacitado para tomar decisiones, en cuyo caso el derecho corresponderá a sus familiares o personas legalmente responsables.
6. El usuario tendrá derecho a negarse al tratamiento, excepto en los casos señalados en el punto 5, debiendo para ello solicitar el alta voluntaria, en las condiciones que señala el punto 6 del apartado de Deberes.
7. El usuario tendrá derecho a que se le asigne un médico cuyo nombre deberá conocer y que será su interlocutor válido con el equipo asistencial. En caso de ausencia. Otro facultativo del equipo asumirá la responsabilidad.
8. El usuario tiene derecho a que quede constancia por escrito de todo su proceso; esta información y las pruebas realizadas constituyen la Historia Clínica.
9. El usuario tiene derecho a que no se realicen en su persona investigaciones, experimentos o ensayos clínicos sin una información sobre métodos, riesgos y fines. Será imprescindible la autorización por escrito del paciente y la aceptación por parte del médico, de los principios básicos y normas que establecen la Declaración de Helsinki. Las actividades docentes requerirán así mismo, consentimiento expreso del paciente.
10. El usuario tiene derecho al correcto funcionamiento de los servicios asistenciales y aceptables de habitabilidad, higiene, alimentación, seguridad y respeto a su intimidad.
11. El usuario tendrá derecho en caso de hospitalización a que ésta incida lo menos posible en sus relaciones sociales y personales. Para ello, el Hospital facilitará un régimen de visitas lo más amplio posible, el acceso a los medios y sistemas de comunicación y de cultura y la posibilidad de actividades de que fomenten las relaciones sociales y el entretenimiento del ocio.
12. El usuario tiene derecho a recibir cuanta información desee sobre los aspectos de las actividades asistenciales, que afecten a su proceso y situación personales.
13. El usuario tiene derecho a conocer los cauces formales para presentar reclamaciones, quejas, sugerencias y en general, para comunicarse con la administración de las Instituciones. Tiene derecho, así mismo a recibir una respuesta por escrito.
14. El usuario tiene derecho a causar ALTA VOLUNTARIA en todo momento tras firmar el documento correspondiente, exceptuando los casos recogidos en el Art. 5 de los Derechos.
15. El usuario tiene derecho a agotar las posibilidades razonables de superación de su enfermedad. El hospital proporcionará la ayuda necesaria para su preparación ante la muerte en los aspectos materiales y espirituales.
16. El usuario tiene derecho a que las instituciones Sanitarias le proporcione: Una asistencia técnica correcta con personal cualificado. Un aprovechamiento máximo de los medios disponibles. Una asistencia con los mínimos riesgos, dolor y molestias psíquicas y físicas.
Deberes:
1. El usuario tiene el deber de colaborar en el cumplimiento de las normas e instrucciones establecidas en las Instituciones Sanitarias.
2. El usuario tiene el deber de tratar con el máximo respeto al personal de las Instituciones Sanitarias, los otros enfermos y acompañantes.
3. El usuario tiene el deber de solicitar información sobre las normas de funcionamiento de la Institución y los canales de comunicación (quejas, sugerencias, reclamaciones y preguntas). Debe conocer el nombre del médico.
4. El usuario tiene el deber de cuidar las instalaciones y de colaborar en el mantenimiento de la habitabilidad de las Instituciones Sanitarias.
5. El usuario tiene el deber de firmar el documento de Alta Voluntaria, en los casos de no aceptación de los métodos de tratamiento.
6. El usuario tiene el deber de responsabilizarse del uso adecuado de las prestaciones ofrecidas por el sistema sanitario, fundamentalmente en lo que se refiere a la utilización de servicios, procedimientos de baja laboral o incapacidad permanente y prestaciones farmacéuticas y sociales.
7. El usuario tiene el deber de utilizar las vías de reclamación y sugerencias.
8. El usuario tiene el deber de exigir que se cumplan sus derechos.
Derechos del moribundo:
1. -El derecho a saber que va a morir.
2. -El derecho a rehusar un tratamiento.
3. -El derecho a expresar su propia fe.
4. -El derecho a mantener la conciencia lo más cerca posible de la frontera de la muerte evitando el dolor.
5. -Morir sin el estrépito frenético de una tecnología puesta en juego para otorgar al moribundo algunas horas suplementarias de vida biológica.
6. -Morir manteniendo con las personas cercanas contactos humanos, sencillos y enriquecedores.
SEGURIDAD Y ATENCION AL PACIENTE.
La salud de los pacientes es uno de los principales retos del cuidado de la salud en el país. Un informe de 1999 del Instituto de Medicina calcula que entre 44,000 y 98,000 personas mueren todos los años en Estados Unidos a consecuencia de equivocaciones cometidas por descuidos en la seguridad del paciente.
Existen cosas que usted puede hacer para recibir una atención de salud más segura. Algunas son tan simples como asegurarse de que durante el tiempo que permanezca en el hospital su pulsera de identificación tenga el nombre correcto. Otras formas de reducir los riesgos son:
• Hacer preguntas cuando tenga dudas o preocupaciones. Pedirle a un amigo o familiar que lo ayude a hacer preguntas y entender así las respuestas
• Asegurarse de haber entendido lo que ocurrirá en caso de que necesite una operación
• Informarle a los profesionales de la salud sobre todas las medicinas que toma, incluso los medicamentos sin receta médica y los suplementos dietéticos, así como todas las alergias o reacciones adversas a la anestesia
• Obtener una segunda opinión acerca de las opciones de tratamiento
• Conservar una copia de su propia historia clínica
Un accidente se ha definido como todo aquello que ocurre en forma inesperada y sin intención o un acontecimiento inesperado e indeseable: una desgracia casi todo lo que ocurre podría prevenirse si la victima hubiese pensado más o si la enfermera le hubiese brindado la atención necesaria utilizando los equipos de protección y tomando las precauciones de seguridad recomendadas, o pensando en la seguridad del paciente y en la suya.
Los tipos más comunes de accidentes que ocurren en casa, el trabajo, la escuela, y principalmente en los hospitales o en cualquier otra parte, son los debidos ha:
1- Caídas y otras lecciones con objeto mecánico en el ambiente.
2- Muerte a causa de negligencia, ya sea médica, como por el personal de enfermería.
En general, se piensa que un hospital es un sitio al que acuden las personas enfermas y lesionadas para recibir atención medica y curaciones; rara vez se considera un sitio en el que se puedan lesionar. No obstante el número de accidente en los hospitales es extraordinariamente alto, en comparación con el de la mayor parte de las industrias.
Los problemas de seguridad al paciente en los centros de salud, relacionado con la atención del enfermo son múltiples. Hay dos grupos de personas por considerar:
1- Los pacientes, que requieren protección adicional porque están enfermos.
2- El personal medico, que por lo natural de su trabajo es vulnerable a muchos tipos de lesiones accidentales.
Los miembros del personal del hospital tienen la responsabilidad del anfitrión en cuanto a la seguridad de los huéspedes. De ordinarios hay una gran planta mecánica con equipo pesado que conserva en marcha el establecimiento. El servicio de alimentación es para la seguridad en la preparación, manejo y servicio adecuado. Los procedimientos de diagnósticos suelen ser peligrosos desde el punto de vista de posibles lesiones químicas y mecánicas a los enfermos y al personal, asó como de infecciones., además, hay el riesgo constante de incendios, las pesadillas de los administradores del hospital, que podrían implicar una gran catástrofe, ya que la mayor parte de las poblaciones recientes están debilitadas por enfermedades o su movilidad esta limitada de otra manera.
En consecuencia, la atmósfera del hospital en si, es un factor que aumenta la posibilidad de accidentes. La valoración de la enfermera sobre los problemas para proteger a los pacientes, los visitantes y el personal de los peligros ambientales, incluyen dos grupos de actividades:
1- Estudio de los factores que alteran la capacidad del enfermo para tomas las precauciones adecuadas a fin de protegerse.
2- Análisis de los posibles peligros de entorno que pudieran ser perjudiciales para los enfermos, los visitantes y todo el personal.